En este mes del amor, he estado enfocando el tema desde diversos ángulos en mis conversaciones de coaching, en mis comentarios y en salas de #ClubHouse en las que hemos abordado el amor y todas sus facetas. Yo siempre digo que #MerecesLoMejor y parte de eso es disfrutar del amor. Me duele mucho ver que hay quienes odian San Valentín porque en este momento no tienen pareja. Eso no debería tener nada que ver. Ya sé que los medios promueven esa perspectiva y que esta fiesta es principalmente comercial. Sin embargo, en lugar de dejarnos presionar, podemos aprovechar para celebrar el amor en todas sus acepciones:
Amor romántico.
¡Sï! Celebra con tu pareja si la tienes. Aprovecha el día para recordar porqué se eligieron mutuamente. No se queden solo en el intercambio de regalos (que no tiene nada de malo y es una buena costumbre) sino en hacer el día significativo, sin presiones. Yo recuerdo con mucho cariño cómo mi amado esposo llegó en su motocicleta con un gran oso de peluche montado con él como si viniera manejando. Ese gesto, aunque fue hace muchísimos años, resulta siempre memorable y lo tengo grabado en el alma. No tiene precio algo así, solo recuerda que estás construyendo los recuerdos del mañana. Y si no tienes pareja, aprovecha para hacer el ejercicio de auto-análisis: escribe en un papel todo lo que deseas en una pareja, escríbelo con musiquita rica y en un ambiente que te llene de entusiasmo. Cuando termines léelo y verifica cuáles de esas cosas podrías construir en ti mismo mientras esperas el encuentro…
Amor filial.
La familia de nacimiento o elegida, esas personas con quienes pasamos el día a día, celebramos las dichas y compartimos las penas son una fuente enorme de amor. Aprovecha estos días para decirles lo importantes que son para ti. La cercanía hace que a veces lo demos por obvio, o que aparezca con ellos la defensividad y la crítica, la duda, la dificultad. Aún así, es momento de recordarles lo mucho que los amamos.
Amor de amigos.
«La amistad es el más puro de los amores. «
En ocasiones lo olvidamos. Los amigos están con nosotros por elección, se alegran cuando nos alegramos y se preocupan por nosotros. No buscan algo en específico, solo nuestra presencia, nuestra empatía y nuestro tiempo. Yo recuerdo que cuando era niña el día de San Valentín no era una fiesta tan comercial. Comprábamos corazones de dulce y enviábamos mensajes cariñosos (en papelitos) a todos los amigos. Me recuerdo repartiendo estos presentes por la escuela y emocionándome de lo que otros mandaban para mi. Hoy en día puede ser un mensajito de audio o video, creado pensando específicamente en esos amigos el que exprese toda la profundidad que significa en nuestras vidas la amistad.
Amor propio.
Este es el amor que tienes por tí, el que es la base de poder expresar todo el amor a los demás y a la vez el secreto para poder recibirlo. Ayer les compartía 4 ideas que puedes explorar contigo para profundizar tu mentalidad de cultivar el amor propio. Puedes ponerte recaditos que te lo recuerden, adquirir una práctica diaria de escribirlos y reflexionar sobre ellos o usarlos como anclas de escritura o reflexión. En el diálogo de corazones creé algunas meditaciones guiadas para profundizarlos. Espero poder compartirlas pronto.
- Soy suficiente.
- Soy una persona amorosa.
- Soy una persona digna de ser amada como me gusta serlo.
- Vivo rodeado de amor.
Espero que te inspiren a cultivar el más hermoso de los amores, el amor por ti. Me recordó la canción de Whitney Houston… y me dieron ganas de cantarla. Aquí te dejo la original. Siempre me saca la lagrimita así que con tu permiso… voy a emocionarme un poco. ¡Hasta la próxima!